21 de septiembre de 2011

Comienzo de un posible cuento...

A lo largo de la historia de la humanidad se han propuesto dos tipos de personas: Las que creen y las que crean. Por obra y gracia -o imprudencia- de la lengua castellana hemos de notar que ambos grupos pueden decir "Yo creo", y cada enunciado tiene perfecta validez.
Entonces, el trabajo restante quedará para el lector. Será él quien deba completar, ad infinitum, una u otra cosmogonía, cada vez que alguien se proclame como creyente o, por el contrario, como creador.

No hay comentarios: